Ejemplo de Fair play

Ejemplos que debemos seguir aquí en Gaztelueta
Gran ejemplo de "fair play" en el equipo alevín del Sporting de Gijón
El joven jugador del Sporting Riki sueña con ser una estrella del fútbol; a sus 11 años ya lo es del juego limpio tras protagonizar una acción de 'fair play' al lanzar fuera un penalti injusto que el árbitro había señalado a favor de su equipo. Riki acató la decisión de su técnico, David Caelles, como un alumno, un alumno de esa 'escuela' que es Mareo, a la que el entrenador confiere el valor específico de educar y formar, además de enseñar a jugar. El Sporting se jugaba el liderato de la categoría Primera Alevín de Asturias y precisaba ganar su encuentro ante el Romanón a domicilio, tras haber vencido el Astur en la jornada matinal, para conservar la primera plaza.En su gesto, algo habrá influido que pertenezca a la exitosa cantera de fútbol de Mareo y también que está habituado a convivir en sus instalaciones con las figuras del presente y del pasado sportinguista.Con el partido empatado a cero, Riki recibió el balón y tras tropezar con el portero rival, Diego, vio cómo el árbitro decretaba un penalti claramente injusto. Había tensión en las gradas, y Caelles le ordenó que lo lanzara fuera. Así lo ejecutó el pequeño Riki, que comparte la decisión de su entrenador. El Sporting alevín acabó ganando 1-3.Su ídolo es Messi.
A la pregunta de si enviaría el balón fuera en un penalti ante el principal rival sportinguista, el Real Oviedo, la pequeña figura gijonesa responde que "no", aunque matiza que "si el entrenador lo dice...".Riki confiesa que sus jugadores favoritos del Sporting son Barral y Raúl Cámara, y que el barcelonista Leo Messi es su preferido del fútbol mundial. Caelles reconoce que un "cúmulo de circunstancias" en un partido un "poco alterado" le han llevado a tomar esa decisión por el "bien de los niños, y del fútbol".El técnico reivindica la aportación educativa del fútbol "como personas y futbolistas", y renuncia a que los niños "desde alevines les enseñamos a tirarse, perder tiempo y aprovecharse de cosas". Caelles sabe que su ejemplarizante decisión le acarreará algunas bromas, la más temida vendrá de su propia casa. Está preparado para una especial, esa que nunca falta, la de 'Quini'. "Algo dirá, se meterá conmigo", bien le conoce.